Me formé como facilitadora en Técnicas de Memoria Celular®, terapia que conocí como resultado de buscar mucho para salir de un vacío profundo en el que me encontraba. Suena a cliché, pero allá por el 2011, todos los aspectos de mi vida –pareja, estudios, trabajo- estaban en piloto automático y nada reflejaba mi deseo real.

Ese año viví un renacer, esta terapia me asistió hacia un vivir desde mi verdad, mi autenticidad. Fui saliendo del automatismo y empecé a elegir a conciencia ¡desde la libertad!

Todo en mi vida fue mutando ¿o era yo que estaba aprendiendo a respetarme y valorarme?

 Escuché a mi cuerpo y cambié mi alimentación, empecé a vincularme desde la apertura y confianza y muchas personas nuevas aparecieron en mi vida, nutriéndola. Aplicaba los ejercicios cada vez que me estresaba o volvía al piloto automático, y me ayudaban – todavía me ayudan- a centrarme y volver a conectar conmigo. Todo eso se reflejaba en mi salud y bienestar. Alivié alergias y dejé de necesitar lentes, todo se iba acomodando. 

Lo que no estaba en mis planes era que también encontraría mi vocación, el llamado de mi alma.

Allá por el 2014, empecé a recibir consultas en el living de mi casa, después del trabajo, “en mis ratos libres”. Pronto se convirtió en un llamado muy potente de servicio ¿Cómo ignorarlo? Me hice cargo de este llamado, y acá estoy.

Hoy brindo sesiones de sanación energética, aplicando lo que aprendí en mis inicios y todo lo que fui sumando en estos años. ¡Me fascina seguir aprendiendo!

Sumé el cursado de Coaching Ontológico a mi ávida curiosidad y me hice millones de preguntas. También transité caminos hacia la naturaleza y el Chamanismo, encontrando la verdad detrás de la verdad, detrás de la verdad…. Y sigo. 

Me acepto así, ñoña e investigadora del Eneagrama, la Ley de atracción, las afirmaciones y frases sanadoras, el poder de curación de nuestras manos, las Diosas de cada Mujer, y sobre todo, la maravillosa capacidad que tenemos para activar el flujo energético de nuestros cuerpos. 

Mi deseo más altruista es contagiarte esta fascinación por aprender más sobre vos.

Aprender-te y aceptarte, amarte en cada aspecto de tu Ser y confiar en que contás con la sabiduría y la magia para disfrutar tu proceso de transformación. 

¿Mi varita mágica? El testeo muscular (TMMP), que te permite, respetuosa y suavemente, acceder a todas tus dimensiones, “conversar” con tu cuerpo físico, mental, emocional y energético.

¡Te abrazo y doy la bienvenida a mi mundo!

M A R C E L A      S A N T T E